lunes, 2 de octubre de 2017

Arestines.


Amigos y seguidores de este nuestro blog, en esta entrada vamos a hablar de los arestines, un problema muy común que a veces tiene fácil solución si tomamos las precauciones adecuadas.
Los Arestines, son un eczema o psoriasis de las falanges que afecta a las zonas del menudillo, los talones y las cuartillas de las extremidades del caballo. La exposición reiterada a la humedad, el sudor, el barro o la suciedad son las causas que predisponen a que aparezcan arestines, que en algunos casos pueden resultar molestos y dolorosos para el caballo.
Generalmente, la piel sana del caballo actúa de barrera protectora, pero las condiciones de alta humedad, el frío, las lluvias, los terrenos fangosos, cuadras húmedas y sucias o poco ventiladas, pueden facilitar la aparición de diversos microorganismos. Los caballos con las extremidades blancas son propensos a padecer arestines, yo recomiendo tener más precauciones con ellos, para minimizar el riesgo de que aparezcan. Es recomendable después de duchar un caballo, tener una toalla a mano para secar las extremidades, esa es la primera precaución a tomar.
Cuando aparecen los arestines se presentan como una leve dermatitis, la zona de la cuartilla se encuentra irritada, dolorida, sensible, enrojecida y caliente. Si el daño es alto, la zona estará más blanda y con heridas abiertas. Además, se percibirá pérdida de pelo, inflamación y costras, llegando incluso a provocar infecciones y profundas grietas en las zonas afectadas.
Los síntomas de los arestines son:
  • Irritación de la piel de la zona de los pliegues de la cuartilla, mostrándose la zona dolorida, sensible, enrojecida y con calor.
  • Existe perdida de pelo.
  • La piel se muestra costrosa e inflamada.
  • Si la dolencia está muy avanzada pueden aparecer exudados provocando infecciones del miembro afectado.
  • Cuando esta muy avanzada puede llegar a formar profundas grietas en la zonas afectadas. Estas fases son de gran molestia y dolor para el caballos.
  • En esas fases la cojera será marcada, si bien en las fases iniciales también puede aparecer.
Para que no aparezcan los arestines, es recomendable prestar mucha atención a la limpieza de la zona de atrás de la cuartilla y los talones (es la zona donde suelen aparecer). No se trata solamente de quitar el barro, sino de saber que la humedad también puede ser una causa de que aparezcan los arestines. Secar los pies y las manos de los caballos después de la ducha se tiene que convertir en una rutina. 
1.- Tan pronto como diagnostiquemos la patología, debemos alejar al caballo del entorno que le esta provocando el problema. 
2.- Eliminar el pelo de la zona afectada incluyendo una zona de seguridad alrededor de la misma.
3.- Lavar la zona si es posible con un jabón antibacteriano y antifúngico, yo utilizo betadine (solución de yodo).
4- Quitar las costras con cuidado para no dañar aún mas la zona afectada.
5.- Después lavar para limpiar el yodo.
6.- Secar bien la zona afectada. 
7.- Ponerle un gel o cremas calmantes, la vaselina también ayuda. En el caso de que la zona estuviese infectada, seria necesario un tratamiento a base de antibióticos que vuestro veterinario os debe suministrar, también existen pomadas especiales para arestines que hay que comprar en tiendas de veterinaria, son muy efectivas pues matan los microorganismos, pero hay que aplicarlas con guantes.