domingo, 30 de octubre de 2016

Soluciones a problemas comunes

Una buena relación nace del respeto y afecto.
Amigos y seguidores de este nuestro blog, este mes les voy a dar unos consejos muy útiles para mejorar su relación con sus caballos Ibéricos durante su adiestramiento.

Todas las personas que trabajamos con caballos tenemos la obligación de tener unos conocimientos mínimos sobre la naturaleza del caballo.
Tenemos que recordar que aunque sea un animal doméstico, no deja de ser eso, un animal instintivo que piensa y siente de manera similar a otros herbívoros.
Hay personas que tienden a otorgar comportamientos humanos a los caballos, es decir a humanizar al animal, otras al contrario, someten por la fuerza al caballo.
Los dos comportamientos me parecen excesivos, conociendo la psicología animal he aprendido que el caballo no quiere ser humano ni tampoco un objeto al que quitarle toda su libertad al someterlo.
El caballo quiere encontrar su sitio en su manada y colaborar con el hombre si este lo respeta y atiende sus necesidades naturales.
Si un jinete entiende la naturaleza del caballo podrá llegar a un buen entendimiento en su manejo.
El caballo es un animal de manada, en ella se siente protegido, a ningún animal le gusta estar solo. Las luchas por el liderazgo que observamos en los potros son inducidas por el instinto, son luchas feroces, recordemos la fuerza del animal, pero por otro lado los caballos también se relacionan con sensibilidad y afecto. Cuando un potro deja de pelear es porque acepta su sitio en la jerarquía de la manada, a veces se ven obligados a buscar un nuevo grupo o crear el suyo propio obligando a otras yeguas a seguirle.
Lo curioso es que la experiencia y las decisiones vitales en las manadas la suelen tomar yeguas veteranas, los machos tienen más el papel de proteger y reproducirse con su grupo.
Todo jinete debe de saber que el caballo en su relación con el hombre acepta esa jerarquía.
Un jinete tranquilo con la suficiente experiencia que actúe de forma coherente, será aceptado como su líder por el caballo.
El caballo no es un animal que ataque por propia iniciativa, más bien es un animal de huida, peleara si no le queda otra opción. Para los herbívoros la huida inmediata es la mejor protección por ese motivo la inseguridad puede llevarle al comportamiento de huida, un caballo que entra en pánico puede ser peligroso.
El caballo no puede evitar tener ese carácter esquivo y huidizo, está en su instinto, nunca debemos castigarlo por ese comportamiento.
Nuestro deber es ganarnos su confianza con paciencia y afecto, mostrarle situaciones nuevas sin crearle estrés, acostumbrarlo a colaborar con el hombre de forma que sea positiva para ambos.

El caballo necesita hacer ejercicio, en su estado natural camina todo el día para buscar comida, necesita sentir el aire, la luz y relacionarse con sus congéneres. Hay que tener en cuenta todo esto cuando lo tenemos estabulado y en su manejo diario.
Por este motivo cada vez hay más personas que dejan sus caballos la mitad del día sueltos en potreros, así son felices en un entorno más natural para ellos.
En este siglo XXI estoy viendo crecer entre los jinetes una nueva corriente de pensamiento, ahora se busca la colaboración con el caballo, ya no es el sometimiento la base del adiestramiento, las personas ven al caballo como un compañero, no como una herramienta o alguien al que anular sus voluntades. El adiestramiento sabio acostumbra al caballo a colaborar con el hombre a cambio de un estímulo que le parezca atractivo (ejemplo: un azucarillo cuando entiende lo que se le pide), este estimulo será menos decisivo en el futuro cuando el caballo tome por habito el trabajar con el hombre.
Todos los caballos tienen caracteres y características que les diferencian entre sí.
Por este motivo no todos reaccionan igual durante su adiestramiento, en este artículo les voy a mostrar algunos problemas y soluciones que nos pueden suceder al adiestrar un caballo pura raza español.

Caballos asustadizos:
Una de las virtudes del caballo PRE es su valor y calma ante lo que le rodea, pero también hay caballos que sienten miedo con facilidad al ver cosas nuevas o colores llamativos.
Contra este miedo la solución es acostumbrar al caballo a nuevos estímulos sin dar importancia a sus reacciones, es decir, si el caballo sale al galope al ver un perro, no lo frenen, aprovechen y trabajen el galope en círculos hasta que el caballo se calme y se acostumbre a el.

A veces el miedo lo tienen a las personas, pues acostumbremos al caballo a que el trato con el ser humano es bueno, que quiero decir, pues cada vez que estemos frente al caballo acariciémoslo, darle golosinas es también muy efectivo.
Existen dos razones para que los caballos se asusten:
Las actitudes o reacciones del jinete y los ruidos, objetos llamativos o incidentes externos.
Ante estos problemas, ofrezco estas soluciones: Primero no criticar ni maltratar por la actitud del caballo, segundo no dejar que la ira o el temor nos hagan ser bruscos con el animal. No es necesario averiguar por qué el caballo se asusta,  si lo hacemos le damos la razón al caballo, es mejor simplemente continuar trabajando sin prestar atención.
Muchas tensiones las produce en el caballo el propio jinete, si el caballo se asusta por culpa del jinete, el caballo puede perder la confianza en nuestro liderazgo.
Muchas veces el caballo es el espejo en el que se ven reflejados los defectos del jinete.
Un jinete con miedo o ansiedad, es propenso a causar tensiones en su monta que se reflejan en el comportamiento del caballo, pasa lo mismo con jinetes que utilizan ayudas muy toscas, piernas y manos demasiado duras, en resumen cualquier exigencia excesiva.

¿Cómo darnos cuenta de que algo no va bien?
Cuando un caballo se siente estresado, empieza a asustarse.
La sensación en las riendas se vuelve pesada, inestable o se pierde el contacto.
Los aires pierden su gracia, se vuelven planos, irregulares.
El dorso del caballo se hunde porque el cuello del caballo se tensiona.
Su cola se mueve incesante, latiguea.
Ojos tristes, sin expresión.
¿Cómo terminar con la tensión?

El mejor remedio es no prestar atención directa al estado de excitación del caballo y relajarnos, tenemos que transmitirle confianza y demostrarle que somos el líder utilizando nuestra inteligencia.
También suavizar nuestras ayudas y hacer trabajos sencillos premiando los momentos de calma y concentración del caballo son de gran ayuda para acostumbrar al caballo a trabajar sin tensión.
Debemos de ser agradecidos con el caballo, que quiero decir con esto, pues premiar los avances con una caricia, una palmadita, darle un azucarillo. Es recomendable que el jinete construya un vínculo afectivo y de confianza con el caballo, esto mejorara su relación y ayudara a que su adiestramiento sea más sencillo.

Otros problemas en el adiestramiento:
Caballo rígido, difícil de incurvar. Este problema es debido a tensiones en el cuello y dorso. El problema viene de un jinete con manos duras y dominantes.
Trote y galope incomodos para sentarse. Este problema es debido a que los músculos del dorso no se usan bien, falta equilibrio y actividad. El problema es causado por rigidez del jinete o una monta muy forzada.
Caballo que corre, precipita los aires. Este problema viene del desequilibrio, dolor, nerviosismo, dorso no relajado. A veces la causa es un jinete duro con sus ayudas.
Rechinar de dientes, boca abierta, saca la lengua. Este es el claro reflejo de un caballo que no se siente bien al ser montado, tal vez siente dolor o angustia emocional o su jinete es muy dominante y abusa de sus manos.
Caballo pesado en las riendas. Este problema se debe a la falta de actividad y equilibrio, el caballo se carga en las espaldas. Este problema es debido a que el jinete es rígido no da bien sus ayudas, usa las manos para bajar la cabeza.
Caballo que se tuerce. Puede ocurrir que el caballo tenga dolor en algún miembro o que el jinete lo comenzó a reunir muy pronto.
Caballo que cabecea. Puede ser que el caballo sienta dolor en el dorso, debido a una montura mal ajustada o tenga problemas dentales.
Caballo que se alcanza la mano con el pie. Este problema es debido a que el caballo usa de forma activa los posteriores pero su dorso no trabaja adecuadamente, también un mal herraje puede ser la causa.

Soluciones:

La fórmula más recomendable para manejar bien a los caballos es seguir la escala de formación de la FEI.
Debemos de montar desde atrás hacia delante, dar prioridad a nuestras piernas y asiento antes que las manos.
No sobre esforzar al caballo y ponerle una silla adecuada que no lo lastime, también utilizaremos una embocadura suave y adecuada a la longitud y ancho de su boca.
Herrar al caballo periódicamente por un buen herrador que lo aplome de forma correcta.
La opinión de un experto es muy valiosa, yo recomiendo tomar clases de equitación con alguien con la experiencia suficiente.

domingo, 14 de agosto de 2016

El caballo PRE, una opción para el deporte?


Grandioso en Rio 2016
Amigos y seguidores de este nuestro blog, en este artículo le voy a dar mi visión de como se debería manejar la cría del caballo PRE, si queremos que este llegue a la alta competición.
Todas las razas de caballos se mantienen y se crían con un objetivo, por ejemplo, el caballo PSI (Pura Sangre Inglés) se cría para las carreras.
Cuando un grupo de criadores tiene un objetivo común, buscan en sus caballos cualidades físicas y genéticas dentro de los estándares aprobados de una raza.
Si una persona decide criar caballos, debe tener en cuenta varios factores, entre ellos, uno de los más importantes: ¿Cuál es el fin de criarlos?
En la mayoría de los casos, el objetivo es la venta, entonces un criador debe saber qué tipo de caballo tiene más demanda entre los aficionados a la equitación.
Los deportes hípicos con más éxito en la actualidad, son el Salto, el adiestramiento (dressage) y el concurso completo, las tres disciplinas son olímpicas.
Para afirmar estos datos, me baso en el número de participantes en pruebas internacionales; estas tres disciplinas son las que mayor representación tienen en juegos olímpicos.
Un criador de caballos de raza, se tiene que especializar en un campo; la mayoría vende caballos para el deporte. Hay un número importante de criadores de caballos de salto en todo el mundo y suelen venderlos a precios altos; estos ejemplares cumplen con determinadas cualidades, se supone que son hijos de caballos de probada eficiencia en el salto, que pertenecen al grupo de caballos de razas abiertas, (ejemplo: holsteiner, silla francés...). Aquí tenemos entonces un campo en el que un criador se especializa, este a su vez, puede pertenecer a un grupo definido de criadores que se asocian con un interés común para mantener un criterio selectivo, agrupado dentro de los parámetros que forman una raza, ejemplo: criadores de caballos de raza westfaliana para salto.

El objetivo de la crianza del caballo PRE, es conservar las cualidades físicas y las características raciales; se crían caballos dentro de lo que se conoce como raza cerrada, es decir, solo entre caballos registrados como PRE; no se puede meter sangre de otra raza para mejorar esta, o conseguir alguna cualidad extra, como se hace en otras razas abiertas.

Sin embargo, por mantener la pureza de una raza se corren varios riesgos, primero: problemas de consanguinidad; y segundo: la limitación a la hora de mejorar cualidades físicas que no se encuentran dentro de la raza.

 ¿Cómo mejorar entonces las cualidades físicas del PRE?

Empezando con la elección del semental y de la yegua que este cubrirá.
Un buen ganadero debe de conocer a sus yeguas y también debe tener suficiente información sobre el semental elegido para cubrirlas.
Solo de esta manera, se podrá mejorar en el potro por nacer, los puntos débiles de la madre y del padre.
Ejemplo: para una yegua con dorso largo y extremidades cortas, buscaremos un semental comprobadamente de dorsos cortos y extremidades más adecuadas en su descendencia.
Si tenemos yeguas muy correctas en su morfología, buscaremos entonces mejorar los puntos débiles de su descendencia.
Ejemplo: cruzar yeguas y caballos con buen paso, buen trote y galope, buscar sementales con fuerza en los posteriores y que transmitan un carácter adecuado para el esfuerzo que requiere el deporte, es decir, que no sean demasiado asustadizos, para que se puedan concentrar, ni demasiado calientes, para que no se desgasten rápido.

 El caso ideal sería siempre cruzar yeguas con estas aptitudes, con caballos con las mismas, así, el margen de error sería mínimo y estaríamos mejorando los puntos débiles del caballo como raza.

El objetivo de la cría:

El objetivo de cualquier criador es conseguir que sus caballos se vendan con facilidad.
En el caso del caballo PRE le podemos añadir un objetivo más, la preservación de las características raciales propias del caballo que motivan criadores amantes de esta raza.
Hasta ahora, el éxito de otras razas, ha radicado en los éxitos deportivos, tanto de sus reproductores, como de sus descendientes, en resumen: los triunfos deportivos atraen compradores; premios es igual a calidad y esta tiene un precio.

En el caso del caballo PRE le podemos añadir como incentivo los trofeos que se otorgan a los caballos en los concursos morfológicos que siempre atraen a los compradores y ganaderos.

Hace años, el éxito en la venta de caballos PRE, lo tenían las ganaderías que ganaban premios en concursos morfológicos, sin embargo, para beneficio de la raza, el mercado se ha abierto hacia otras vertientes como las destinadas al deporte. Por este motivo, hoy por hoy, empiezan a tener éxito los ganaderos que ofrecen caballos de silla, es decir, caballos con aptitudes para ser competitivos en los deportes en los que destaca el PRE.

 Actualmente, el PRE destaca en el espectáculo de la alta escuela, en el enganche y en la doma clásica (dressage o adiestramiento). También en el 2014, hubo un caballo PRE que fue campeón de España en concurso completo (eventing).

 Si nuestro objetivo es satisfacer la demanda del caballo deportivo, debemos de criar basándonos en lograr en nuestros caballos las aptitudes físicas necesarias para destacar en el deporte.
Pero como amantes de esta raza debemos también de preservar las características más buenas del caballo para mantener un tipo racial fiel, pero también funcional.

Por este motivo yo creo también que los ejemplares más enrazados se deberían mantener para recordar al PRE antiguo el precursor, pero otro segmento podría enfocarse a la cría de caballos para el deporte, para posicionar más esta raza y abrir campos de acción y mayor mercado.

 ¿En qué deporte centrar nuestra selección?

Mi recomendación es la cría del caballo PRE enfocado a la doma clásica y me baso en cifras, la mayoría de caballos PRE que se venden desde España, hacia otros países europeos, están destinados en su mayoría a este deporte, ya sea de alta competición o práctica de aficionado, pero ya salen con un objetivo fijado, el resto de caballos exportados, la mayoría yeguas, están destinados a la cría.

¿Qué hacer como criador? Vender yeguas para cría no es la solución, el mercado se satura y bajan los precios.

 El caballo PRE en continua expansión.

El caballo PRE está en continua expansión, cada vez se cría en más países y cada año nacen más ejemplares.

Hablemos en cifras: durante el año 2015, se registraron  en la ANCCE 2500 nuevos ganaderos procedentes de varios países, entre ellos como novedad aparecen criadores en Baréin, Estonia, Lituania, Jordania, Brasil.

 La mayoría de criadores de PRE fuera de España, se encuentran en Estados Unidos y México.
Sumando todas las ganaderías activas de caballos pura raza española que hay en todo el mundo, se alcanzan las 30.000 con un total aproximado de 220.000 ejemplares.
Estas cifras son muy respetables, dando una importancia relevante al caballo PRE, ahora estas cifras en expansión también deben de preocuparnos porque debemos de procurar la cría de calidad, no la de cantidad. Los responsables a la hora de valorar como reproductor un ejemplar deben  de ser cuidadosos ya que de ello depende que los ejemplares reproductores, sean para mejora de la raza y no al revés.

 ¿Es el sistema de selección de sementales el adecuado?

En razas de éxito, como el caballo holandés, los sementales pasan por diferentes pruebas que duran días. En dichas pruebas, el criterio más influyente para aprobar un caballo como semental, son sus cualidades para el deporte, el semental que supera las pruebas, obtiene el prestigio necesario para ser considerado reproductor.

En España, las características raciales han tenido mucha influencia hasta hace poco, la tendencia actual, es aprobar como reproductores a caballos más funcionales.

Un buen ejemplo de gestión, lo tenemos con la raza hermana del PRE, me refiero al Lusitano, los sementales aprobados de esta raza tienen un número limitado de yeguas para cubrir por año y según demuestren su calidad a lo largo del tiempo, este irá en aumento hasta llegar al número ilimitado, que lo tendría el mejor ejemplar, un sistema parecido sería interesante aplicar al caballo PRE para disminuir el número de ejemplares con menos cualidades y alejarlos de la cría.

 Cada criador es libre de decidir cómo manejar su ganadería, pero si quiere tener el prestigio de criar caballos de élite, debe elegir bien a sus yeguas y buscar como semental, a caballos contrastados no solo como padres, sino también como deportistas.

 ¿Cómo empezar con la cría deportiva?

Buscando las cualidades físicas óptimas en las yeguas destinadas a la cría y en sus descendientes.
Estas cualidades son: más alzada, más fuerza en el tren posterior, elasticidad, mejores dorsos, mayor musculatura y menos grasa en cuellos y otras zonas útiles para la locomoción.

 Consejos:

Evaluar las cualidades de las yeguas destinadas a la cría, esto solo se consigue domándolas para averiguar con certeza si tienen buen carácter, resistencia y movimientos.
Aprovecharse de los avances en reproducción: inseminar con semen de caballos que estén comprobados que dan hijos deportivos, también transferir embriones de yeguas que den hijos deportivos, para aumentar el número de potros en la ganadería con su genética.
También con la transferencia de embriones, podemos ver rápido con qué semental repetir; imaginen, si en un año, de la misma yegua sacamos tres embriones de tres padres distintos y el resultado de uno nos ha satisfecho, al año siguiente repetiremos con él, pudiendo obtener de él otros tres embriones.
La castración de los caballos que no sean adecuados como reproductores, nos será muy útil para el manejo de la ganadería, pues se pueden juntar en potreros varios de ellos, sin peligro de que se ataquen, además, los caballos criados en potrero nos ofrecen un costo mínimo. Al vender caballos castrados no correremos el riesgo de que se utilicen de forma irresponsable como sementales.

Recuerden, la mayoría de caballos se venden para ser montados, el que estén castrados no será un problema para su venta, pues hay más jinetes que criadores.

Como ganaderos podemos tomar varios caminos, a mi parecer todos necesarios, uno es el de fijar como objetivo la fidelidad racial, otro la funcionalidad  y las cualidades deportivas y mi favorito juntar fidelidad racial con el deporte.

 Ventajas de criar para el deporte

En resumen, criar para el deporte abre mercado. En mi experiencia, conozco el caso de ganaderos que venden al año un semental y dos yeguas en el mejor de los casos y sus clientes son otros ganaderos que están comenzando a criar. Por otro lado, mis principales clientes venden un caballo cada dos o tres meses, la mayoría castrados porque se los venden a jinetes; las yeguas ya domadas, también se venden bien.
La competición es muy importante, es el mejor escenario para darse a conocer y ver si nuestros caballos gustan al público, competir en doma clásica es obligatorio para ganaderos de élite. Hay un dicho popular en España que dice: “Uno se convierte en ganadero cuando tiene la cobra de yeguas de su propio hierro y un caballo compitiendo en nivel San Jorge”.

Algunas de las ganaderías más reconocidas han logrado vender más ejemplares gracias a los éxitos deportivos de sus caballos que han llegado a ser internacionales.
Todo el aficionado al adiestramiento, sueña con comprar un Fuego de Cárdenas.
En el próximo artículo les daré consejos para iniciarse en la competición con caballos PRE.

viernes, 3 de junio de 2016

Dolor en el dorso

Amigos y seguidores de este nuestro espacio dedicado al caballo y a su adiestramiento, en esta entrada hoy les voy a hablar del dolor dorsal y de los caballos con dorso frío, espero poderles aclarar dudas que les ayuden a mejorar la calidad de vida de sus caballos.
El dorso del caballo es una estructura muscular muy compleja y larga, además los músculos que lo forman mueven y dan estabilidad a la columna vertebral.
El dolor dorsal es muy difícil de localizar y también suele ser de difícil curación. A veces nos puede indicar que hay un problema en otra parte que crea tensión ahí, porque recordemos que el dorso es la transmisión de la fuerza generada en los posteriores.
Las causas más frecuentes suelen ser: los giros bruscos, caídas en libertad o caídas al dar cuerda al caballo, saltar incorrectamente, desequilibrio o falta de compensación del jinete, jinetes con mal asiento o sobrepeso.
Los caballos de dorso largo padecen distensiones musculares aunque los de dorso corto son propensos a problemas vertebrales.
También una montura mal colocada o muy larga que produce presión indevida y las enfermedades como la artritis o el "kissing spines" producen dolor dorsal.
Sintomas:
Cambio de temperamento.
Mala actitud ante el cepillado.
Se revuelca más a menudo.
Descansa un  pie o descansa los dos de forma alternada.
Se tensa o ahueca el dorso cuando se monta.
Estira mucho el cuello al montarlo o no lo quiere estirar cuando lo intentamos hacer.
Va rigido, no abanza o galopa desunido.
Al tocar su dorso con los dedos parece que se incomoda.
Desplaza la cola hacia un lado.
Movimientos torcidos.
Consejos:
Asegurarse de que la montura no le molesta y que el jinete al montar tiene una posición correcta.
Hacer un buen calentamiento al paso.
Si el caballo es adulto, antes de trotarlo, hacer ejercicios al galope en asiento ligero.
Haga ver a su caballo por el veterinario y el masajista equino.
Los masajes y antiinflamatorios ayudaran en el proceso de mejora, un tiempo de reposo y un programa de ejercicio controlado sera el tratamiento, el calor y el solarium son muy eficaces tambien.
Caballos con dorso frío:
Son caballos que nada más subirse el jinete, arquean o hunden el dorso o intentan derribar al jinete.
Causas:
Dolor dorsal o recuerdo de el.
La diferencia entre el dolor dorsal y el dorso frio es que el caballo a medida que trabaja y calienta deja de mostrar molestias cuando es de dorso frio.
El dorso frío es un aviso de que algo no va bien, chequea tu caballo con ayuda de un veterinario, puede tener una leve cojera, o otra molestia de tipo nervioso-muscular que curada a tiempo puede ser fácil de sanar.
Consejos:
Trabaja a la cuerda 10 minutos antes de montar.
Cincha poco a poco a tu caballo.
Subete con ayuda de una grada o escalera.
Una vez ensillado, pasealo de la mano unos minutos antes de montar.
El fisioterapeuta equino te puede enseñar como calentar su dorso antes de trabajarlo.


lunes, 9 de mayo de 2016

Consejos para la competición.


Amigos y seguidores de este nuestro blog, por petición de nuestros lectores, este mes le voy a dar unos consejos para preparar las competiciones de adiestramiento.
Para aquellos lectores que me conocen en persona ya saben la dedicación y los años que llevo compitiendo en esta disciplina sobre todo aquí en América del Sur, durante todo este tiempo pues me ha pasado de todo, he tenido buenos concursos, he disfrutado de los exitos de mis alumnos, pero también hemos tenido dias malos, por este motivo quiero compartir mis experiencias con todos ustedes para darles ideas para su preparación.
El primer paso es preparar el traslado de los caballos, las inscripciones, licencias... todo debe de estar al dia.
La planificación con mucha anticipación es muy importante, debemos de conocer y ejecutar bien todos los ejercicios que nos van a pedir en concurso. Debemos de estar seguros de que el caballo va a responder, no podemos ir sin haber confirmado todas las lecciones en nuestra casa.
Partiendo de este punto los resultados en competición nos darán indicaciones para como continuar el entrenamiento diario.
Cuando tenemos ya inscrito el caballo para el concurso y vamos a embarcarlo en el camión para acudir a el, debemos de asegurarnos de que no olvidamos ninguna documentación necesaria, tanto del jinete como del caballo.
Después el caballo debe de embarcar al camión con sus protectores de viaje bien ajustados, necesitaremos protectores de pies, manos, cola... Si hace frío le añadiremos una manta ligera y con caballos nerviosos existe la posibilidad de ponerle un protector para golpes en la nuca.
El caballo viajara a gusto si le atamos una red con heno, así pastara hasta la llegada y se mantendrá entretenido.
Llevaremos un cajón con la montura, cincha, cabezadas, vendas, sudaderos, el equipo de limpieza y aseo del caballo, grasa de cascos, gomas para trenzar, esponja, paños para limpiar botas y cueros con jaboncillo, un par de mantas una para el sudor otra para el frío si es invierno y muy importante el botiquín de primeros auxilios.
Debemos de llevar también calderos para el agua, un comedero portatil, heno y sobrealimento suficiente, nunca se sabe si se demorara mucho el caballo en regresar a su establo.
Cuando lleguemos al lugar del concurso debemos de hacerlo con suficiente antelación, hay que dar tiempo al caballo a beber agua y a aclimatarse un poco. Es bueno darle un paseo pie a tierra para que se relaje y se estire un poco.
Si tenemos la suerte de contar con un buen palafrenero o "mozo" ,como decimos en mi tierra, le encargaremos la tarea de asear al caballo una vez más y de trenzarlo, si no lo tendremos que hacer nosotros con suficiente tiempo.
Ya tenemos el caballo ensillado y listo para el calentamiento, hemos mirado el orden de salida y hemos comprobado que va todo a su hora y no hay novedades, entonces comenzaremos el trabajo de calentamiento del caballo, en este momento si tenemos entrenador le pediremos consejo, si no tenemos entrenador pues haremos un repaso de los ejercicios desde los fáciles a los más complicados.
Es recomendable participar en un nivel inferior al que le corresponde al caballo, así los ejercicios saldrán más fácil y no habrá tanta presión.
Al adquirir experiencia aumentará el rendimiento correcto.
Después de realizar la prueba, tenemos que conseguir las notas de los jueces y las copias de las lecciones calificadas para leer con calma las anotaciones y consejos, esto es muy importante pues nos ayudara a mejorar.
Terminado el concurso daremos tiempo al caballo a secarse y relajarse, le podemos dar un poco de heno y agua cuando el caballo este seco y en calma, esto puede ser pasada una hora de su prueba.
Al prepararnos para embarcar debemos de asegurarnos de que el caballo no sube al camión ni sudado ni recien comido, también de que no nos olvidamos nada y menos la documentación del caballo.
Consejos para el entrenador:
El objetivo del entrenador es mejorar las habilidades fisicas y mentales del jinete para conseguir un desempeño efectivo.
Poco a poco debemos de conseguir que nuestro alumno se vaya valiendo por si mismo y así lo dirigiremos menos y llegaremos antes al objetivo.
Un buen entrenador necesita una buena técnica, una formación adecuada y debe de conocer bien los reglamentos.
El entrenador debe de tener una táctica, un plan para llegar a cumplir los objetivos. Debe de conocer bien al caballo, sus capacidades y nivel. Con la credibilidad conseguiremos que el alumno no nos culpe de sus fracasos. Hay que trabajar pensando en mejorar el rendimiento de jinete y caballo.
Para esto nos serviremos de un plan de trabajo, un buen herrador y veterinario.
El entrenador poco a poco debe de preparar al jinete para alcanzar metas más altas, debe de facilitarle las herramientas necesarias para seguir subiendo, a veces toca cambiar de caballo, son decisiones con las que debemos de contar junto al jinete y su familia, siempre debemos ser sinceros y explicar bien paso a paso todo lo que se debe de tener a mano para abanzar, los costos y capacidades de jinete y caballo, ser realistas desde el principio, no soñar con alcanzar éxitos con caballos inadecuados, se necesita también disciplina y continuidad en el entrenamiento.
Debemos de creer en lo que hacemos, el alumno es más importante que un concurso, los contratiempos no nos deben desanimar, debemos de estar preparados para lo bueno y lo malo, aunque los resultados son el reflejo del entrenamiento en casa y del entrenamiento antes de la prueba.


domingo, 13 de marzo de 2016

Consejos para el adiestramiento del caballo.


Amigos y seguidores de este nuestro blog, respondiendo a algunos de los mails que me enviáis  pidiéndome consejos para la mejora del rendimiento del caballo de doma clásica, he recopilado y ordenado algunos de ellos para crear este nuevo artículo.

El primer consejo que les quiero dar es para mí el más importante: debemos de conocer bien a nuestros caballos, debemos saber si están cómodos, sanos y con buena moral, también debemos de conocer su capacidad física, hacerlo trabajar fuerte cuando está cansado solo lo desmotivara y lo hará reacio a esforzarse más en un futuro.

Cada caballo es diferente, unos son verdaderos atletas y otros necesitan más paciencia para obtener de ellos el máximo rendimiento.

Por este motivo cada caballo necesitara una forma diferente de calentamiento y una forma diferente de aplicarle las ayudas, también necesitaran diferentes intensidades de esfuerzo a la hora de trabajar.

Cuando viajo a España a menudo me llaman de ganaderías en donde crían caballos ibéricos, allí aconsejo sobre el entrenamiento de los caballos y casí siempre me preguntan los dueños la misma pregunta: “¿Cuál es el problema de nuestro caballo, por qué no conseguimos que mejoren sus capacidades deportivas?”  Por desgracia les suelo contestar de la misma manera a todos: “el problema no lo tiene su caballo, el problema lo tiene su jinete que no hizo un buen trabajo de base y ahora repercute en su rendimiento.”

Muchos jinetes se saltan partes de la escala de entrenamiento, otros jinetes quieren avanzar y enseñarles cosas difíciles a sus caballos sin que estos estén lo suficientemente musculados y equilibrados, otros sobre esfuerzan al caballo buscando movimientos más espectaculares y lo que consiguen es lesionarlos. También hay jinetes que creen que por bajar la cabeza del caballo ya lo tienen en las ayudas, usan mucha mano y lo que consiguen es dañar al caballo negándole la impulsión.

En resumen, me he dado cuenta de que muchos criadores en su ignorancia de lo que es saber cómo trabaja un caballo de forma correcta, dejan sus caballos en manos de personas con una formación insuficiente. Este es un grave problema, una mala conducción de un caballo desde el comienzo de su adiestramiento termina por arruinar su vida deportiva, cuantas veces he visto buenos caballos ibéricos que han terminado su vida como caballos de paseo porque sus jinetes los apuraron y enseñaron trucos de feria que terminaron con las capacidades físicas y psíquicas del animal.

Con un buen trabajo de base, siguiendo la escala de formación FEI, el caballo mejorara sin sufrir tensiones y se podrá ir aumentando la dificultad de los ejercicios sin problemas más adelante.

Con los caballos brillantes, tendremos paciencia, trabajaremos sin prisa, con los caballos menos talentosos aun tendremos más paciencia y esperaremos resultados con más tiempo.

El primer problema que suelo encontrarme con los caballos mal entrenados es un mal contacto y mala conexión.

Si un caballo se esconde de la mano, lo empujaremos hacia delante y lo dejaremos con una mano suave que recobre la confianza, muchas transiciones con poca mano y mucha pierna nos ayudaran.

Si un caballo nos baja mucho la cabeza y se esconde, lo activaremos y no utilizaremos apenas la rienda exterior.

Si un caballo cabecea, nos indica tensión muscular excesiva, puede estar cansado e incluso sentir algún dolor.

Con la mano baja, dejando que el cuello se estire hacia delante y abajo junto a una pierna interior activa conseguiremos que se relaje y emplee bien el dorso.

Si un caballo es muy caliente y quiere correr, nosotros con el asiento marcaremos el ritmo adecuado, lento y con cadencia, una vez conseguido nos ponemos al paso y repetiremos buscando lo mismo, si sigue queriendo correr, lo montaremos en un círculo de 10 metros y con el asiento y la pierna para retener lo llevaremos más lento y ordenado.

Despues de cada esfuerzo haremos una pausa al paso, haremos esfuerzos con el caballo en repeticiones breves y efectivas seguidas de pausas. No hay que prolongar demasiado los ejercicios y no hay que trabajar en el mismo ritmo todo el tiempo, eso aburre al caballo, hay que trabajar mucho en las transiciones y montaremos tanto en ritmos lentos como en más crecientes, en aires de trabajo, medios y largos.

Si tenemos un caballo con poca impulsión dejaremos las manos quietas y buscaremos más energía sin acortar el cuello, siempre es mejor un cuello estirado hacia el filete, un perfil largo que busque el contacto con la nariz a la altura del pecho.

El 90% del éxito montando a caballo es nuestro asiento, el 10% sería la eficacia de nuestras ayudas, la experiencia y una buena técnica. Trabajemos el asiento correcto, hay que darle mucha importancia, pidan ayuda a un amigo, que este los corrija o les sujete el caballo a la cuerda y los ayude a montar sin estribos ni riendas.

Espero que estos consejos les sirvan de ayuda, en otro artículo les pondré soluciones a otros problemas que les pueden surgir durante el adiestramiento del caballo joven.